¿ACASO NO LE VES?

¿No le ves? ¿Es que acaso no le ves?

Hace tiempo atrás, de todos, fue el más cuerdo

cuando ahora ostenta entre los locos un lugar

privilegiado sin tener trono alguno.

¿No le ves? ¿Es que acaso no le ves?

Hace tiempo atrás, de todos, fue el más cauto

cuando ahora con los temerarios disfruta

del privilegio nunca verbalizado.

¿No le ves? ¿Es que acaso no le ves?

Hace tiempo que escondiera su corazón

dejando de lado el calor que emanaba

con tal de conseguir la Eternidad.

Aunque esta fuera de claro antinatural,

carente de algún sentido

o un movimiento ilegal en el ajedrez

mientras pudieran cantar los peces

porque él mismo les enseñó.

Y sería algo didáctico

el que pudieran cantar los peces

porque algunos de ellos hasta volar saben.

Aunque en términos correctos

lo mejor es decir que, en realidad, planean.

Pero lo habido es misma Eternidad

lograda al dejar de lado el calor que da

lo excluido de su corazón al olvido.

¿No le ves? ¿Es que acaso no le ves?

O mejor aún, ¿no le sientes?

Aunque no es su voluntad que lo hagas.

Aunque su presencia será el mejor licor

con el que te embriagará antes

de que sin saber cómo estés en sus brazos.

Explican que era tan bueno

que por él fue plasmado el Santoral

que resultó reducido en un único nombre.

Y este, mientras resultaba pulcro y reluciente,

no tenía la tentación de ensalzar

su figura con un busto.

¿Sabes por qué no le sientes?

Porque no tiene la necesidad.

Hace tiempo que saboreó el mejor licor

y le son indiferentes

sus efectos y los que en él se embriagaron. 

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