DE GUÍA UNA BOLA DE CRISTAL

Mira tu Bola de Cristal.

A ver cuánto del futuro

puedes leer a través de ella.

Si es así... es mejor que olvides

el concepto de libertad.

Atado. Estarás atado

por mucho que quieras

dar cualquiera de tus sustos

que a tus víctimas das

al verlos desprevenidos.

Los tienes bien observados.

Esa fría sonrisa

del que se siente superior

es lo que delata

tu ansia de tener el control.

La acaricias al mirarla.

Ya saboreas tu objetivo.

Pasarás sobre su vera

de forma sutil y ofreces

el hombro del depredador.

Pero no. Es que no eres libre.

Observa cada arrebato

que te da cuando no puedes

cumplir todos los patrones

que formula la Bola de Cristal.

Necesitado del Orden

que le da significado

a cada jornada

sufres de la angustia

cuando ves algo cambiado

que tus esquemas corrompe.

Y es que si no lo consigues

te vas dándote la razón...

vas reforzando así tu ser

y lo que tienes en mente

para no dejar nada a la casualidad.

Nada. Nada ha de escaparse

a lo que tenías previsto.

Y si es que así fuera...

le darás la vuelta.

La Bola de Cristal...

representa tu alma

con cada uno de tus miedos

luchando por esconderse.

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