CUANDO TE CONSTRUYEN UN BAÚL

Que dicen que pueden leer la mente.

Saber lo que estás pensando

a cada momento dado.

Que dicen saber cómo te sientes.

Aunque la silla esté coja.

También lo que necesitas

y de lo que andas escaso.

Y que serán los que te lo arreglen.

En consecuencia, no te preocupes. 

Saben cómo han de arreglarlo

con su receta mágica.

Pues saben qué ronda por tu mente.

A qué llora tu corazón

y a qué le abraza con pasión.

Dicen que mejor no te preocupes,

pues guardan una fórmula.

Quizás resulte ser mágica, o no.

Que sea guardada en un recipiente

o la mantengan al aire libre

con tal de sentir el calor del Sol.

Pero saben lo que necesitas,

y de lo que andas escaso.

Sólo ellos lo saben.

Aunque lo que sientes

resulte ser muy profundo

y verdaderamente personal.

Sólo te piden que seas paciente.

Aunque tengas que esperar un tiempo.

Aunque veas pasar otro verano

porque eso es lo que más te conviene.

Agárrales de la mano.

Por el futuro no te preocupes.

Es un quebradero menos de cabeza.

Es lo que se llamaría elegir bien

y no tener que preocuparte nunca más.

Es la forma de quitarte la mochila,

de que ya nunca jamás te pese.

Porque tienen la solución al problema

antes de que su cuerpo se entone

ya que conocen tu sino. 

Y hasta lo conocen mejor que tú.

Por ello te muestran el ímpetu

con el que te construyeron un baúl.

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