HAY MOMENTOS Y MOMENTOS
Dame un momento,
déjame acabar
lo que entre manos
tengo y enseguida
estoy contigo.
No es importante,
pero es mejor
que a medias
no se nos quede.
Es un instante,
le falta esto
y ya podrás
importunarme.
Aguarda un poco,
poco le falta
en su acabado
y ya soltarás
lo que has guardado.
Bueno, esto ya está.
¿Qué quieres decirme?
Tómate tu tiempo,
no guardes nada.
Venga, respira.
¿Quieres beber algo?
¿Un poco de agua?
Bébela despacio.
Eso es, respira.
Tómate tu tiempo,
tira de calma
con tal de sacarlo.
Venga, comienza.
No voy a empujarte.
Sácalo despacio,
deja que fluya.
¿Fumas, verdad?
Vale, sólo
a veces,
en los momentos
de estrés.
Toma, enciéndelo
y trata de ordenar
lo que quieres decir
y bebe algo de agua.
Ve poco a poco.
Mira, haz un esquema
de lo que has de decir
y ve con paciencia.
Ahora empieza.
Ve despacio.
Bien, eso es.
Ve aligerando
el lastre.
Comentarios
Publicar un comentario