CUATRO ESTROFAS, NADA MÁS

Fueron cuatro estrofas

guardadas en latas,

nada más y nada menos,

las que cerraron las mentes.

Fueron cuatro estrofas

bien engalanadas, 

nada más y nada menos,

las que rociaron las mentes. 

Fueron cuatro estrofas

con lindas palabras,

nada más y nada menos,

las que rumiaron las mentes.

Era un orquestado teatro

hasta el más nimio detalle;

aquel telón y sus formas,

la música que sonaba

o el atrezzo que se lucía.

Todo, todo estaba diseñado

de forma milimétrica

y sin aristas posibles.

Hasta todos sus colores

con sus tonos de certeza

eran todos ellos diseñados.

Era un diseño perfecto

del que no escapaba nadie;

la luz tenía de sus horas

unidas con la oscuridad

en una triste travesía. 

Y sí, fueron cuatro estrofas

las que mutaron cada dos por tres

teniendo el mismo significado.

Tenían diferentes formas,

pero guardaban lo mismo.

Era un distinto envoltorio

guardando los mismos hablas.

Hasta contenían cada silencio

habido en medio de tempestades

al ser rotos por palabras.

 "Malditos Bastardos" (kinefilia.wordpress.com)