Pone a un perro en el lugar del conductor con tal de evitar una multa
Además de presentar signos de embriaguez, trató de darse a la fuga
europapress.es
En el día de hoy les traemos otro posible ejemplo de lo que llamaríamos "viralidad". El epicentro de este se ha dado en Facebook, en la página de la que dispone la Policía de Springfield, una localidad del estadounidense estado de Colorado. Y es que el cuerpo policial de este municipio, el cual tiene el mismo nombre que las otras 49 localidades en la que reside la familia Simpson, decidió hacer pública una sanción sin que sirva de precedente con tal de "notificar al público sobre la actividad policial de manera oportuna".
A tenor de lo sucedido pocas personas llegarían a creerlo a no ser que fuera por ese mismo escrito. Por decirlo de forma rápida, un hombre fue detenido tras tratar de huir de los agentes después de ser pillado conduciendo borracho un vehículo y, prepárense para lo que van a leer, poner al volante a un perro con tal de evitar la multa. Además de esto, circulaba a 52 milas por hora, el equivalente a 83 kilómetros en esa misma franja temporal, en una zona en la que la velocidad máxima permitida era de 30 (estamos tirando del nombrado primer sistema de medición).
Teniendo en cuenta esto habrán deducido que la zona se trataba de un tramo urbano. En concreto, iba por las cercanías de la Séptima Calle Y Main Street sobre las 23:20 de este pasado dia 13, sábado. Cuando un agente se acercó al vehículo observó el surrealista movimiento mediante el cual el can fue puesto a ocupar el asiento del conductor. Su sorpresa tuvo que ser mayúscula. Incluso, al salir del vehículo, el ocupante llegó a afirmar que él no era quien conducía. Además, presentaba claros síntomas de embriaguez, por lo que al ser preguntado sobre si había bebido salió huyendo del lugar.
Por desgracia para él, su aventura apenas duró 20 yardas, lo que vienen a ser un 18 metros. Después de todo esto, los agentes averiguaron dos cosas. Primero, que el hombre se dirigía desde Las Animas a Pueblo y que habiéndose perdido acabó en Springfield. Además de ello, tenía vigentes dos órdenes de arresto en el último municipio que les hemos señalado. Finalmente, y tras la colaboración en su arresto de la Oficina del Sheriff del Condado de Boulder (BCSO por las siglas en inglés), fue llevado a la cárcel del Condado de Baca.
Pero ahora les plantearemos dos curiosidades. Una: ¿qué pasó con el perro? Pues no fueron presentados cargos en su contra y ha sido acogido por una amistad del conocido mientras estuviera en la cárcel. ¿Y cuál ha sido la condena de la persona que centra esta historia? Pues se le acusa de conducir bajo la influencia del alcohol, de hacerlo con el permiso suspendido (esto no se lo habíamos narrado) y con un estado que le incapacitaba para ello. También por exceso de velocidad y resistirse al arresto.
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