Echa a un cocodrilo de su negocio hostelero con una sartén

La hembra habría estado acudiendo al lugar en busca de alimento durante 15 días después de que un macho se impusiera en su territorio

Kai Hansen, de rojo, en su local (afar.com)

Sea cierto o no, comentan que la sociedad tecnológica actual ha transformado el mundo, que lo ha vuelto más pequeño. Esto supone que con un 'click' se puedan enfrentar las distancias físicas y facilitar la comunicación con una persona que esté, por ejemplo, en las antípodas de nuestra posición actual en el globo terráqueo.
 
A consecuencia de ello comprobamos los efectos de lo "viral", de lo que se vuelve en lo principal en las conversaciones entre las personas. Aunque su lugar de origen se localice muy lejos del sitio en el que estemos. Tanto es así que, aunque parezca increíble, podemos tener constancia de la manera en que una persona espanta a un cocodrilo mediante dos golpetazos de una sartén.
 
Puede resultar inverosímil lo que acaban de leer si no lo habían visto antes. Pero esa misma acción la acometió el australiano Kai Hansen. Las imágenes que han dado la vuelta al mundo fueron grabadas en el rellano del negocio hostelero que regenta, el Goat Island Lodge. Este se ubica a las orillas del río Adelaida, justo a su paso por Mareakai, en el Territorio Norte de Australia.
 
Según las palabras del propio Hansen recogidas por 'The Camberra Times', el cocodrilo es una vieja conocida suya que respondería al nombre de Casey. Por ello la considera su "cocodrilo residente" y, a pesar de lo sucedido, le gustaría que estuviera por la zona. Esto ha ocasionado que Fred, el cocodrilo al que Hansen acusa del comportamiento de Casey, haya sido trasladado a otra zona.
 
Y es que explicaba el hostelero que había pasado dos semanas echando a Casey del lugar después de que Fred, al que también conoce desde hace 15 años, aprovechó su mayor tamaño a la hora de imponerse en el territorio. Debido a ello, Casey iba a la zona en busca de comida. Afortunadamente, Hansen pudo interponerse entre ella y los clientes durante 15 días y mandarla de vuelta al agua.
 
Pero finalmente trató de atacar y se vio obligado a actuar de esta manera. "No diría que es un evento cotidiano, pero debo mantenerme a salvo y hacer lo que pueda", comentó Hansen a la edición australiana del 'Daily Mail'. Según relató habría actuado por instinto. Igual que cuando se ve un perro "frente a ti" al ir conduciendo. No se siente miedo, "solo haces lo que tienes que hacer".
 
Después de que el vídeo se hiciera conocido a través de las Redes Sociales, el conocido presentador australiano Matt Wrigth se puso en contacto con Hansen. Mediante su equipo de 'Outback Wrangler' de National Geographic trasladaron a Fred, el supuesto causante en la manera de actuar de Casey, a otra ubicación. Por su parte, esta última habría podido regresar a su territorio acostumbrado y del que había sido desplazada.







Comentarios

Entradas populares de este blog

Un agujero negro en la oficina

VIAJANDO POR EL ESPACIO

Pide ayuda con tal de encontrar un llavero con valor sentimental