VI LA LUNA
Vi la Luna
en el firmamento.
Unas nubes
la estaban atravesando.
Su figura,
tan radiante
y sonriente,
le daba claridad
a la noche.
Era capaz
de llevar jolgorio
a rincones
que estaban entristecidos.
La esperanza
resultante
parecía manantial
de lo dulce.
Las lágrimas
que hubieran habido
eran fuente
en un río muy caudaloso.
Eran piedras
tan brillantes
que dejaron atrás
todo lo acre.
Trasportaba
la calma, el sosiego,
los alegres
instantes de lo pasado
siendo el pilar
del presente
que se habrá de acercar
en las tardes.
Allí estaba,
sonriéndole al mundo
con su porte
y con su magia irradiando.
Vi la Luna
tan radiante
que parecía parar
días y noches.
elconfidencial.com |
Comentarios
Publicar un comentario