Un perro evita que a su dueño le amputen la pierna tras morderle un dedo

Tenía las arterias obstruidas, por lo que la zona estaba entumecida y no sentía dolor

El cachorro Harley (Mirror)

Se dice que los héroes sin capa son esos que mediante su profesión dan una sensación de seguridad a la ciudadanía; véanse los tan aplaudidos, y ahora parece que olvidados, sanitarios durante la pandemia ocasionada por el CoVid-19. También aquellos que, sin proponérselo, por las circunstancias que fueran, han salvado la vida de alguien o han evitado un trágico suceso. Además, más de uno llegará a definir de eso mismo a muchas mascotas, hubieran sido o no adiestrados con tal fin.

Respecto a esto último, el pasado 19 de abril diferentes medios británicos se hicieron eco del caso de Harley, un bulldog de 7 meses que, indirectamente, evitó que a su dueño le fuera amputada una de sus piernas. Ello debido a que no tenía sensibilidad en esta y, mientras echaba una siesta en el sofá, el can comenzó a morderle el dedo gordo de su pie derecho hasta llegar al hueso. Fue su mujer quien le despertó alertándole de lo que pasaba.

En aquellas fechas David Lindsay llevaba 9 días ingresado en el Addenbrooke's Hospital de Cambridge, Reino Unido. Llegó acompañado de su esposa después de que esta le vendara la herida. Allí observaron que el hueso estaba fracturado. Pero antes de ello, el herido ya había notado que no sentía nada en esa zona. Afirmaba que su pie estaba "completamente entumecido", recogía el 'Daily Mail'. ¿El motivo? Tenía obstruidas dos arterias de su pierna.

Los sanitarios del centro hospitalario dieron con el diagnóstico mediante las tomografías computarizadas que le hicieron al dedo mordido. Lindsay, un albañil jubilado de 64 años, se enfrentaba a la posibilidad de perder la pierna si a esta no se le devolvía el riego sanguíneo.

Estado en el quedó el pie de Lindsay (Derby Telegraph)

En aquellos días estaba esperando a que le colocaran unos "stents" que abrieran las arterias y permitieran que volviera la circulación sanguínea a sus piernas. Según recoge el portal 'Medline Plus', estos son "un tubo diminuto que se coloca dentro de una estructura hueca" que hace las veces de "una arteria, una vena u otra estructura".

Finalmente, tal y como informaba 'Antena 3' este 08 de julio, los médicos le colocaron endoprótesis vasculares, forma en la que en castellano también se conocen a los '"stents". Partiendo de la definición dada por 'Éndolum', hay que añadir que son unas "pequeñas mallas metálicas que se introducen dentro de las arterias cuando estas se estrechan o se bloquean". De esa manera, abriéndoselas, lograron salvarle la pierna. Asimismo, 'Antena 3' añadía que la obstrucción en estas se debía a la diabetes que padecía el paciente.

Cabe destacar que, a pesar del susto, Lindsay afirmó a los medios británicos que no tenía intención de deshacerse de su mascota. Y menos después de haber perdido a dos mastines napolitanos el año anterior. También le fueron administrados antibióticos con tal de evitar una infección que podría extenderse a sus huesos. Extraña concatenación de hechos en el día a día de esta persona que tiene 5 hijas y 11 nietos.