LAS PUERTAS DEL CIELO
Se abren las Puertas del Cielo.
Parece estar lleno de personas.
De eso a lo que se le suele llamar
su clase, casta o su índole social.
También de las distintas edades
archivadas en el tiempo.
No se sabe si es un premio
por seguir con fervor unas normas.
Si es así… ¿qué necesidad habría
de tener que llegarlas a dictar?
Quien la recompensa se merece
no seguiría algún dictado.
No sentirían la obligación
ya que vendría de dentro del alma.
No habría las buenas acciones del día
con necesidad por realizarlas.
Desaparecería lo solemne
ante el espíritu humano.
¿Y cuántos lo habrán comprado?
Todo ese premio de la Eternidad
mediante el disfraz de la Avaricia...
esos que compraron la Eternidad…
¿En realidad la tienen delante?
¿Estarán cerca del Trono?
Aquellos que la vendieron…
¿Los usureros también disfrutan
del Divino Don de la Eternidad?
¿Estos habrán construido la suya
por la sensación más que latente
de acecharles el Infierno?
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