CONOCERSE…

 

El espejo muestra

nuestra propia imagen.

Somos de las pocas

especies capaces

de reconocerse.

Sin embargo, toda

esa gran lucidez

¿ya nos sirve en la hora

de reconocernos

como ser pensante?

Esa misma esencia

entre nuestras raíces…

esa necesidad 

que se sobreimpone...

¿ya será posible?

Porque siempre avanza

entre cada instante…

¿somos la persona

pasando un momento

u otra diferente?

Un cambio en mañanas

con el atardecer…

esas experiencias

con las que construyen

toda nuestra imagen.

¿La posibilidad

de reconocerse

es una quimera

al ir aprendiendo

con todo el instante?

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