Conduce bajo los efectos del alcohol mientras le practicaban una felación

Venían de fiesta y no supieron explicar por qué iban tocando el claxon

tenor.com

Tal vez sea dar uso al fácil y llamativo recurso del sensacionalismo, pero en ocasiones hay sucesos que se transforman en noticioso por su aparente vulgaridad, aunque esté relacionado con los instintos primarios que ostenta el Ser Humano. Y si esto tiene un carácter de índole sexual la chanza que refleja su notoriedad parece que está asegurada.

Veamos. Trasladémonos, aunque sea de manera imaginaria, a tierras alicantinas, en concreto a la localidad de Crevillent. Y ahora pensemos cuál sería la sorpresa de los Policías Locales del lugar en el momento de ser testigos del hecho que se plasma en los titulares vinculados a lo que leerán en estas, y sucesivas, líneas. Aunque, posiblemente, ustedes mismos también podrían haber quedado estupefactos.

Si no tenían constancia del suceso, y han decidido pasar a la lectura de ello, deben saber que su publicación en los medios de comunicación fue a partir del día 5 de este mes. Los agentes locales dieron el alto al vehículo del protagonista después de que pasara dando bandazos, además de ir accionando el claxon, en el Paseo del Retén.

En un primer momento los agentes llegaron a pensar que iba sin compañía. Esto es así ya que únicamente alcanzaron a ver la silueta del conductor. Una vez que el vehículo estuvo detenido vieron que su acompañante, una mujer, estaba practicándole una felación. Además, como queriendo redondear lo que se podría calificar de estrambótico de la situación, ambos irían completamente desnudos.

Todo esto tras una pequeña persecución después de que la patrulla saliera de la Comisaría de Crevillent y se percataran de la situación mientras se acercaban a su vehículo. ¿Qué se les pasaría por la cabeza, los dos eran de Elche, al ver que les hacían señales lumínicas con tal de que detuvieran su marcha? Era domingo de madrugada y el conductor presentaba claros signos de embriaguez. Ambos alegaron que venían de "pasar una noche de fiesta y de un concierto", explica 'Información'.

Por lo tanto, el conductor tuvo que someterse a un test de alcoholemia en el cual marcó un registro de 0,75 miligramos por litro en sangre. El máximo es de 0,25. Esto conllevó la inmovilización del vehículo y la imputación a este por conducción temeraria y triplicar la tasa máxima de alcohol permitida. Todo ello por la vía penal. Además, hay que añadirle que no está permitido ir desnudo en un vehículo, que el hombre se enfrentará a un juicio rápido y, lo más curioso del todo, que la pareja no supo explicar por qué iban tocando el claxon.

Sin carnet y la ITV caducada

tenor.com

Y es que el instinto carnal florece continuamente, y si no que se lo digan a otro varón que fue multado en Murcia allá por julio de 2018 en unas circunstancias similares. En este caso hay que añadirle dos factores más. El primero de ellos es que en aquellos momentos no llevaba encima el permiso de conducir. Además, la ITV del vehículo estaba caducada.

Y aquí uno de los factores más llamativos podría ser la redacción de la razón de la multa por parte del agente. Esta rezaba que el motivo, u hecho, era por "conducir el vehículo reseñado sin mantener la propia libertad de movimientos". Añadía, además, que "la acompañante tenía situada la cabeza en la entrepierna del conductor, el cual llevaba los pantalones bajados hasta los tobillos".

Esa descripción tan gráfica viene precedida de una forma 'zigzagueante' de conducir. Una patrulla motorizada de la Policía Local fue testigo de la situación y, al acercarse al turismo, un Audi de gama alta, observaron lo que ocurría dentro del interior del vehículo. Los hechos sucedieron en la Rotonda Norte de la capital de la Región de Murcia, en el barrio de Santa María de Gracia.

Tras someter al hombre a un test de alcoholemia, este marcó un resultado positivo de 0,5 miligramos, detallaban en su momento medios como 'Mallorca Diario'. Pasaban pocos minutos de las 10:30 de la mañana y al conductor se le impuso una multa de 80 euros, aunque esta habría sido rebajada a los 40 en caso de un abono rápido del importe.

La acción se amparaba en el artículo 18 del Reglamento General de Circulación, el cual detalla que los conductores están obligados a "mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía".

Los agentes también denunciaron su positivo, lo cual conllevó la perdida de 4 puntos de carnet y una multa de 500 euros. Lo mismo pasó con la ausencia física de este y tener caducada la ITV durante dos años.

Por estos lares también pasa

sfmnews.net

¿Esto sucede por tierras vascas? Pues parece que sí. Podemos remontarnos a enero de 2016, cuando sobre las 06:00 de la mañana una patrulla de la Unidad de Tráfico de la Ertzaintza "pilló" a una pareja en actitudes parecidas a la altura de La Avanzada, Barakaldo. Al igual que en el caso anterior, mientras los agentes patrullaban por la Bi-637 observaron un vehículo que iba dando "bandazos", indicaba 'El Correo' por aquel entonces.

Fue al momento de hacerle señales lumínicas con la intención de indicar su presencia cuando se percataron de lo que sucedía. También comprobaron que tenía síntomas de estar bajo los efectos del alcohol. Tras acompañar el vehículo "a un lugar más seguro", el conductor se negó a someterse a la prueba de alcoholemia.

Ante esto, fue investigado por un delito contra la seguridad vial, por su negativa a pasar el obligatorio test de alcoholemia y debido a sus síntomas de embriaguez. También fue denunciado administrativamente por poner en peligro a los usuarios de la vía debido a que "la ocupante del asiento lateral derecho le realizaba una felación".

Antonio Canales y la playa

tenor.com

Aunque si se han dado cuenta únicamente hemos hablado de encuentros de ámbito heterosexual. ¿No pasa lo mismo entre homosexuales? La cuestión sería que cuando la naturaleza pica por ahí abajo... ¿hay diferencias entre las orientaciones sexuales? Pero en este caso vamos a recordar un caso que, fortuna, no acarreó ningún peligro hacia la salud de sus protagonistas o las personas que estaban cerca.

O tal vez sí. Porque las tan cacareadas imágenes del bailaor Antonio Canales practicando sexo oral al que era su pareja en agosto de 2011 resultó ser un montaje orquestado por este último, Juanjo, que le salió "rana" e hizo mucho daño a la carrera profesional de Canales y a su familia. "Chúpasela a quien quieras, pero que no te vea medio mundo", comentó en 'Espejo Público' el bailarín que le dijo su padre.

14.000 euros habría pactado recibir el camarero por el aparente "robo" del momento. "Si me los hubiera pedido se los habría regalado", le explicó sarcásticamente el bailaor a Fran Rivera, además de añadir que "él supo dónde llevarme y dónde colocar a los cámaras", ya que, según explicó, se trataba de una playa nudista gay de Sitges. ¿Cómo se lo explicó a sus tres hijos? Con una comida que le preparó su propia madre y a la que acudió con su "perrita" al son de... "¡Aquí está el maricón de España!".