Y DIJO...

 ...entonces dijo:


"Soy voz,

soy palabra,

pero no soy

esclavo 

de estas,

de ellas

nos convierten

los demás.


"Soy yo,

soy persona,

no soy centro

ni el faro

de otras,

ni agua 

que le hidrate 

a un alma.


"Soy silencio,

y qué triste

es ser el dueño

de estos

como si cotizaran

en cualquier 

bolsa 

de valores.


"Soy silencio,

y que calle

no es el reflejo

neutro

por el que otorgara

dictamen

a las 

discusiones.


"No soy luz,

ni oscuridad,

tal vez,

puede que

un granito 

de arena

en lo inmenso

de la intensidad.


"No soy luz;

la oscuridad,

tal vez, 

puede que

sea refugio

del alma

que se embriagó

con la claridad. 


"Soy, fui, seré...

las partes de mis

experiencias

ante el mañana

que las contenga.


"Veo, vi, veré...

o quizás

sentiré

partiendo

de lo que sentí

en algún ayer 

que vino

y está por venir.


"Veo, vi, veré...

la pared

que viste

dibujos

de algún proyectil

beligerante 

al calor

del acto más vil.


"Soy, fui, seré...

un alma frágil 

silenciada

por artimañas

sin su patentar.


"Mi voz,

mi palabra,

tal vez, quizás,

no sean nada,

pero 

que Dios quiera

no se vuelvan 

en ausencia".


Luego, suspiró...


"Dadme agua

que tengo sed,

recompondré

este alma".


Fue ahí que les sonrió.

Demóstenes (tn.com.ar)























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